- La confederación saluda la decisión tomada hoy por el Consejo de Ministros porque permite avanzar en estrategias de desinstitucionalización, garantizar la continuidad de proyectos como ‘Mi Casa: una vida en comunidad’, o extender perfiles profesionales como el del conector comunitario o el de asistente personal
El movimiento asociativo de Plena inclusión aplaude la aprobación de la Estrategia Estatal de Cuidados en el Consejo de Ministros de hoy. Para la confederación estatal que agrupa a más de 950 asociaciones que defienden los derechos de miles de personas con discapacidad intelectual y del desarrollo se trata de un cambio de paradigma en favor de transformar los sistemas de apoyo y cuidado que se ofrecen a las personas que viven situaciones de dependencia, vulnerabilidad o exclusión.
“El cambio que se propone hacia un nuevo modelo de cuidados implica también reformar la Ley de Dependencia garantizando la continuidad de proyectos que ponen en el centro la vida independiente y los apoyos en la comunidad a las personas con discapacidad intelectual”, ha defendido Carmen Laucirica, presidenta de Plena inclusión España. “Nos preocupa la fragilidad de la financiación y la rigidez normativa, porque se convierten en obstáculos para un proceso transformador que se enmarca en mandatos internacionales como la Estrategia Europea de Cuidados de larga duración”, añade Laucirica.
Desde la confederación que presta apoyos a más de 150.000 personas con discapacidad intelectual y del desarrollo, a través de 4.000 centros y servicios extendidos por todo el país, se recuerda que avanzar en estrategias de desinstitucionalización también supone garantizar la financiación de proyectos como ‘Mi Casa: una vida en comunidad’ (una experiencia exitosa de pisos de vida independiente y en comunidad para personas con discapacidad intelectual y grandes necesidades de apoyo), o promover perfiles profesionales como los de los conectores comunitarios o los de la asistencia personal.
Plena inclusión insiste en que uno de los retos estratégicos que encara desde hace una década Plena inclusión, cuando se embarcó en un proceso generalizado de transformación en sus entidades, reside en asegurar que el proyecto de vida de cada persona esté conectado con su entorno social de referencia. La confederación estatal aboga por que el derecho básico a una vida digna, elegida y en el contexto al que cada persona pertenece, cuente con los apoyos necesarios. Y también subraya que la desinstitucionalización y este nuevo modelo de apoyos permiten avanzar en el mandato constitucional recogido en la reciente reforma del artículo 49 de la Carta Magna.
Interdependencia y vida en comunidad
Para las cerca de 400.000 personas con discapacidad intelectual y del desarrollo (autismo, parálisis cerebral y síndrome de Down, entre otros) que residen hoy en España, siguen estando vigentes los principios defendidos en la Convención de la ONU para los Derechos de las Personas con Discapacidad. Este tratado internacional, que España ratificó en 2007, marca en su artículo 19 como horizonte irrenunciable la defensa del derecho de todas estas personas a vivir de forma independiente, en un contexto de interdependencia y participando del día a día de sus barrios y pueblos.
(Ver esta nota en la web de Plena inclusión España)